sábado, 16 de marzo de 2013

LA MALA ENFERMA


Ayyy... una noche complicada.
Me diagnosticaron enfermedad de Crohn cuando tenía 16 años, aunque ya desde mucho antes padecía síntomas, indicios de que había una irregularidad (por llamarlo de alguna manera) en mi aparato digestivo.
He estado buscando blogs donde hablen de esta enfermedad y del embarazo pero no lo he encontrado, así que he decidido hablar de este tema en este blog, simplemente para compartirlo por si hubiera alguien en la misma situación, ahora o en un futuro...

Como os decía, desde que era pequeña sufría síntomas que me hacían pensar que algo no iba bien del todo. Mis padres tenían claro que lo mío no era normal. ¿Y qué era lo mío? pues lo mío era: ir al baño muchísimas veces al día, gastroenteritis constantes, vómitos, dolor, gases, hinchazón de tripa, cansancio extremo...

Con 16 años tuve un episodio muy desagradable, me puse malísima y no podía ni moverme de la cama del dolor. Prácticamente me tuvieron que llevar en brazos al hospital, y allí me quedé ingresada hasta que dieron con lo que me pasaba. El médico tenía tres posibles diagnósticos: apendicitis (ojalá), cáncer de estómago (no me jodas) y enfermedad de crohn (de lo malo no fue lo peor).
Finalmente vino el médico muy majo él con un informe donde ponía que tenía "Enfermedad de Crohn con afectación en el íleon".

Por resumir un poquito y que esto sirva de introducción al tema, esta enfermedad es crónica y afecta al aparato digestivo. En mi caso consiste en una inflamación crónica del íleon (el último trocito de intestino delgado), que produce que las digestiones se hagan difíciles, y muchas veces el alimento directamente no se digiera. La enfermendad tiene dos fases: activa y latente... durante la fase activa se dan los "brotes", que es cuando me pongo malísima, me ingresan y me hinchan a cortisona.

Afortunadamente he tenido muy pocos episodios desagradables, y a día de hoy llevo 4 años con la enfermedad latente (exceptuando algunas molestias de vez en cuando). Y lo más importante: SIN MEDICACIÓN (no prescrito pero sí aconsejado por el médico), lo cual me garantiza un embarazo (el día que lo haya) sin problemas (los medicamentos para esta enfermedad suelen ser incompatibles con los embarazos, lógicamente).

Bueno, el caso es que anoche entre pitos y flautas no cené pero sí que me tomé unas cervezas. Resultado: un pequeño desajuste que provocó que la vuelta a casa en metro fuera un infierno y que dejara un depósito al Sr. Roca radiactivo en varias ocasiones.
Álex me preparó un arroz "sano y ligero" con zanahoria rallada, calabacín y un huevito y me dío millones de besos...
Todo sería maravilloso si yo no me hubiera puesto farruca y me hubiera dejado cuidar un poquito...

Pues no. Soy una enferma HORROROSA e INSOPORTABLE que no se deja cuidar... enseguida intenté poner mi mayor sonrisa (que claro, se veía falsísima y que hizo que mi pareja pensara que era bipolar) y que todo fuera fiesta y jolgorio.

No sé muy bien cual es la reflexión de todo esto... a mí misma me ha servido para darme cuenta de que llevo esto fatal, y que necesito ajustar un poco lo que siento cuando estoy jodida y dejarme cuidar, y querer... y que si estoy mal, estoy mal... y ya se pasará...

Me pregunto si cuando esté embarazada tendré muchos episodios de "mala enferma" aderezados con el subidón hormonal o directamente me centraré en lo que lleve en mi vientre para olvidar todos los males que puedan acecharme...

...mientras tanto, me dejo querer.

S.
 
 
 

1 comentario:

  1. Buff... debe ser durísimo pasar por eso!

    Y déjate cuidar! Sobretodo eso ☺
    Un besito bien fuerte y espero que hoy ya estes mejor.

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