sábado, 28 de febrero de 2015

...¡¡¡Y LLEGARON LOS BONITOS!!!

Silencio. Toda la casa es silencio, y alegría... Silencio, esa palabra que pensábamos que íbamos a olvidar usar nos sorprende saliendo por los rincones, igual que la alegría de tenerles aquí...

Nacieron el día 17 de febrero, os contaré en otra entrada cómo fue el nacimiento, pero de momento os adelanto que me hicieron una cesárea, y que pesaron bastante menos de lo que habían estimado: Héctor 2'200 y Gael 2'400... les tuvieron en neonatos los cuatro días que estuve ingresada.

Hoy llevamos ya una semanita en casa, y ¿qué puedo deciros? madre mía... la de veces que había leído eso de "tu vida va a cambiar por completo", y ni por asomo eres capaz de imaginar lo que realmente supone ser madre...
Los días ya no tienen sol, ni luna... ahora son todo ciclos, pequeños ciclos que empiezan con olor a leche, y que terminan cuando los pequeños vuelven a descansar tranquilos en su cunita.

La única ventaja que tuvo que estuvieran en la UCI, fue que cogieron unos buenos hábitos de comer cada tres horas y dormirse solos en su cunita, cosa que a día de hoy agradecemos enormemente... durante el día se mantienen muy tranquilos, y sólo hay una hora, a eso de las 10-11 de la noche, que lloran sin consuelo, "la hora tonta", como dice la matrona... aparte de eso, cada día que pasa es todo más fácil... succionan y por tanto comen mejor, nosotros somos más eficientes en los cambios de pañal y tardamos menos, yo voy cogiéndole el tranquillo a esto de amamantar a los dos a la vez... y como ayer me quitaron las grapas de la cesárea, hemos salido todos juntos por primera vez hoy a dar un paseo y comer en casa de los abuelos.

Aquí está el pequeño Gael, también llamado "Pepón","Tragabollitos" y "Tomatito cherry "(esto último gracias a las matronas y enfermeras de neonatos).

Gael es un bebé que tiene una seriedad pasmosa, con gestos de gran pensador, y que me recuerda mucho a su padre.

Su principal motivación es la comida, pero no la que proviene de la teta, sino la que sabe que después llegará con el biberón (que todavía les seguimos dando como complemento hasta que cojan un poco más de peso).

Tiene mala leche, lo quiere todo YA, y si no lo consigue, se pone rojo (como un tomate cherry) y entonces la lía, llorando y emitiendo unos cánticos maravillosos, poniéndose muy tenso él...

Escuchar ese "LA LA LA LA LA LA" suyo es música celestial para nuestros oídos, es vida y mala leche, pero vida al fin y al cabo... (y es tan bonito...).

Éste es Héctor, el pequeño muñeco. Héctor tiene a la familia (y a su padre) conquistados. Es muy risueño, muy tranquilo y buen comedor de teta, además de un succionador de campeonato.

Disfruta escuchándome cantar, y desde hace unas horas he comprobado como si le hablo desde cerca, gira la carita y me busca con la mirada, aunque todavía la mayor parte del tiempo tiene los ojitos cerrados.

Héctor huele muy, muy bien... y se deja achuchar, pero a la vez es paciente y no le importa esperar a que le toque su turno de mimos y besitos.

También llora, no os creáis, pero sólo en casos excepcionales y con un timbre de voz que rompería cristales si no le cogiéramos de inmediato.
Mi pequeño enamorado de la vida...

Empezamos a conocernos los cuatro, bueno, en realidad los seis, que las gatillas les cuidan y les vigilan un montón...

Lo bueno de tener dos, es que no me da tiempo a tener depresión post-parto, aunque el cansancio llega a cotas muy altas...

Para mí, lo más importante es contar como siempre con el apoyo incondicional de mi hombre, que ahora más que nunca está a nuestro lado, diciéndonos lo mucho que nos quiere (y lo guapa que estoy, que en una semana me he quitado 12 kilos).

...todo vuelve poco a poco a la normalidad, pero ahora la normalidad cuenta con dos vidas maravillosas más que hace que seamos inmensamente felices y afortunados.

La vida empieza ahora.

S.


miércoles, 11 de febrero de 2015

36 SEMANAS


Llegamos a las 36 semanas... (alivio).
Suspiro, cojo aire: vengo de la calle. Andar dos pasos es muy costoso... pero sigo intentándolo, sigo haciéndolo...
Tengo hambre, todo el día... la engaño con fruta y zumos naturales, pero lo que me pide el cuerpo es chocolate en todas sus vertientes. Logro luchar con esa ansiedad de atracar la bandejita del chocolate.
Me miro en el espejo: veo una imagen distorsionada de mí misma... en un par de días me ha cambiado la cara, la tengo hinchada... me veo distinta, esa no soy yo...
Tengo sueño, duermo a deshora, y siempre de manera interrumpida, a ratos.

...y mientras escribo, un constante hormigueo recorre mis dedos, ahora hinchados.

Vaya experiencia de vida tan grande, el embarazo... echo la vista atrás y contemplo las fases por las que ha pasado esto, sonrío... qué camino tan bonito, tan lleno de emociones distintas...
El embarazo me ha puesto a prueba cada semana, cada mes, cada trimestre... y lo mejor de todo es que los bonitos han estado bien todo el tiempo... era yo la que cambiaba, era yo la que tenía que luchar con mi propio cuerpo, la que tenía que confiar en que todo iba a salir bien, tranquilizarme y amar... sólo eso: tranquilizarme y amar.

Lo hemos conseguido, soy feliz...

Cuando sonrío me sigo viendo bien, me encuentro a mí misma... ah, sí... aquí estoy yo...

Quiero despedirme del embarazo con alegría y con un poquito de pena también, porque quiero recordar todos los momentos maravillosos que nos ha regalado... Me siento más unida que nunca a mi hombre, y a mi familia... y todas esas personas que debieron estar y ya no están, siguen presentes, disfrutando de este transitar de la vida.

Todo está apunto de cambiar, siento vértigo, un vértigo alegre... miro a mi alrededor, escucho atentamente: silencio. ¿Qué será el silencio dentro de una semana? Probablemente sólo una palabra... pero quiero desterrarla un poquito de mi vida, ahora quiero oír, quiero sentir, quiero oler...

En el mar me sentía libre, como ahora... extrañamente libre... éste es el camino que he elegido, junto a la persona que está a mi lado, y me siento libre por ello...

Lo hemos logrado, mi amor.

S.

lunes, 9 de febrero de 2015

HOME, SWEET TETRIS...

...así estamos, haciendo un tetris en casa, acoplando todas las cosas de los niños de tal manera que quepan y que nos resulte cómodo... pero es imposible. ¡¡Qué barbaridad de cosas!! El carrito, las hamaquitas, la minicuna, la bañera-cambiador, la cómoda con los cajoncitos... también habíamos pensado en comprar un silloncito para la lactancia, pero por no ver otro trasto más, acabaré dando el pecho en el suelo... (nuestro sofá es de estos que "te hundes", no quiero acabar con la espalda hecha un higo).

35 semanas y 5 días... y ya tenemos la última eco y la correspondiente visita al gine. Nos dijeron que los bebés estaban estupendamente... "dentro de la normalidad", aunque uno de ellos es más pequeño que el otro... tenemos un bebé que ya pesaba (hace 5 días) 2'516 y el otro 2'184, uno en posición cefálica y el otro transversal (justo encima del ombligo), así que vamos a esperar a la semana 37 para ver qué pasa con estos bonitos... tengo monitores en un par de días, y la semana que viene (que ya será la 37), también...

Por lo demás,estamos tranquilos, tachando los días del calendario... aprovechando para ver mucho cine, y la serie de "Yo, Claudio", que me tiene encantada.

La tripa a estas alturas es descomunal, como podéis apreciar... pero todavía le quedan 10 días, quizás más, para seguir creciendo y estirándose...

No sabéis lo feliz que me va a hacer callar todas esas bocas que presagiaron que iban a nacer prematuros, y por supuesto que no iban a llegar a los dos kilos... ¡JÁ! pues aquí estamos, y de momento no parece que quieran salir...

Por cierto, la cara que tengo en la foto es por el alucine... cada día me veo mucha más tripa, mi cuerpo me sorprende a una velocidad de vértigo...

Os mando un beso enorme, sobretodo a mi compi de batallas, Eva (de Opiniones incorrectas), que está apuntito apuntito también... mucho ánimo, un abrazo y que pronto esté NM pululando por el mundo...

S.

miércoles, 4 de febrero de 2015

35 SEMANITAS

8 meses.
Lo hemos conseguido... hemos entrado en un lugar llamado "confort"... terminan los miedos del embarazo para dejar paso a aquellos que vienen con la etiqueta "parto" bien puesta... pero son miedos más llevaderos, más fugaces, que se irán en cuanto les vea las caritas...

...qué os cuento en este punto que no haya dicho o que no os imaginéis ya... llevo mucho a cuestas, mi cuerpo no volverá a ser mío hasta dentro de un tiempo, y no podría centrarme en un dolor o molestia porque parecería una viejilla con sus achaques... pero esto es duro, el final es duro... día tras día es una lucha, la mía, por seguir llevándolo así de bien, aunque no pueda apenas moverme, ni dormir... hay que seguir, que sólo nos quedan un par de semanas para llegar a la 37...

...y que hay que delegar, queridas amigas embarazadas, que tenemos que dejarnos mimar, cuidar, querer... para mí el papel de Álex ha sido tan importante... y él no lo sabe, pero lo está haciendo muy bien... no sólo es un apoyo físico para todo aquello a lo que yo no llego, también es un soporte emocional (que es lo más importante) para esta etapa en la que mi estado anímico ha estado influenciado por las dichosas hormonas y el cambio de vida tan grande que ya se empezó a gestar 8 meses atrás...
Lloro, me quejo, me derrumbo... y él está aquí conmigo para abrazarme, sostenerme y sonreír, para decirme que todo lo que me está pasando es muy importante, muy grande... y que es normal que me sienta como me siento... dice que me admira, que se siente muy orgulloso de mí, de cómo estoy llevando el embarazo, y de hasta dónde estamos llegando.

Os recomiendo una peli, que me ha encantado...

Es un documental que trata la vida de 6 mujeres en el momento en el que van a ser madres, dentro de diferentes hospitales de Colombia.

Está lleno de momentos tiernos, otros desagradables... pero sobretodo está lleno de realidad, una realidad palpable, una lucha de éstas mujeres con las que me he podido sentir muy identificada...

La película refleja, desde fuera, situaciones cotidianas por las que seguro hemos pasado prácticamente todas las embarazadas, con respecto al trato que nos han podido dar diferentes profesionales, y quiero pensar que hará reflexionar a aquellos a los que tenga que hacer reflexionar.

...os abandono, por mi hombre, y por la música que ya suena por los rincones cuando traspasa la puerta de nuestro hogar...

S.

domingo, 1 de febrero de 2015

MOMENTOS ESPECIALES



Estrellita del lugar, 
brilla, brilla sin cesar... 

Manda a la tierra tu luz, 
por el norte y por el sur... 

Estrellita del lugar, 
nunca pares de brillar... 



...Aquí empiezan los sueños, la nueva etapa se acerca...
Descansan sobre el colchón dos pequeños conejos, suaves y expectantes. También un búho de colores, que nos toca una melodía de estrellas...

...y aunque parezca mentira, todo nuestro amor descansa encima de ese colchón. No está vacío, sino lleno de ilusión, de cariño, de ternura...

Ganas de verles, de abrazarles, de besarles, de conocerles...

Nos acercamos a la meta: 18 días para hacer las 37 semanas, momento en el que vendréis al mundo...

...tenemos tantas cosas bellas que mostraros, tantas personas hermosas a las que presentaros... tantos planes que queremos compartir con vosotros...

...y todo un mundo os espera, una vida entera, para que poco a poco aprendáis a elegir cómo vivirla...

Os queremos mucho, bebés.

S.